Vicente Rojo
Al abrigo del viento
sólo hay muerte
todo vuela viajero pez o espada
nada decae brote o flor te engañas
el cuerpo cae pero dueño empero
de otro saber
todo vuela viajero pez o espada
nada decae brote o flor te engañas
el cuerpo cae pero dueño empero
de otro saber
caer caer
no reo
de alguna nube levadiza tala
escritura y razón
oh red
ondean esculturas
salta al cielo
para caer
caer en otro amor y pende
ángel del hilo del olvido que
al abrigo del viento sólo hay muerte
no reo
de alguna nube levadiza tala
escritura y razón
oh red
ondean esculturas
salta al cielo
para caer
caer en otro amor y pende
ángel del hilo del olvido que
al abrigo del viento sólo hay muerte
En la laguna habita
nuestro espíritu
Dibuja:
aguas arriba, el humo;
aguas abajo, el fuego.
Tu sueño halla en el fondo la salida: el eclipse total.
Dibuja:
aguas arriba, el humo;
aguas abajo, el fuego.
Tu sueño halla en el fondo la salida: el eclipse total.
Dichoso será aquel que se prolongue
y en medio de las llamas no se encienda. entrad, entrad
cayendo como las dinastías.
y en medio de las llamas no se encienda. entrad, entrad
cayendo como las dinastías.
La sangre
ofrece un nombre
a lo siempre anterior.
ofrece un nombre
a lo siempre anterior.
Mediodía del cuerpo
transparente
deja el imán para el otoño dicho
penetra hasta el cristal confía
en el asombro que atraviesa el aire
signo intocable dilatado asilo.
deja el imán para el otoño dicho
penetra hasta el cristal confía
en el asombro que atraviesa el aire
signo intocable dilatado asilo.
Si has llegado hasta el trono,
multiplica tu fe. Inmutable,
sé infiel al escarmiento de la cera.
Aquí, en el altivo campo de las ofrendas, una mano despoja y
reconoce las ardientes estrellas que florecen cuando toda
escritura se apaga. Así es mi canto: ausencia.
sé infiel al escarmiento de la cera.
Aquí, en el altivo campo de las ofrendas, una mano despoja y
reconoce las ardientes estrellas que florecen cuando toda
escritura se apaga. Así es mi canto: ausencia.
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